Al menos cinco profesores de secundaria y una maestra de primaria lograron la reinstalación en sus plazas docentes, luego de más de tres años de un prolongado proceso judicial, tras comprobar que “somos afectados por la reforma educativa peñista, pues en la mayoría de los casos nos cesaron por negarnos a participar en una evaluación punitiva”, informó José González Figueroa, dirigente del magisterio disidente y uno de los afectados.
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