Además de auxiliar a la población en caso de desastres naturales, las fuerzas armadas han sido empleadas –sin un marco legal que les dé certeza jurídica– para combatir al crimen organizado en distintas actividades delictivas. Para ello, el gobierno mexicano ha tenido el apoyo de Estados Unidos mediante la Iniciativa Mérida.
de La Jornada: Política http://bit.ly/2Mz2Cmg
No hay comentarios:
Publicar un comentario