Debería ser evidente, pero no lo es. Sin un Estado capaz de articular la miríada de intereses que conforman la economía y, al mismo tiempo, promover, sostener y auspiciar, mediante la inversión y el gasto público, la inversión privada no hay posibilidad de cambio. Simplemente, nohay crecimiento económico, ni de la producción, ni del empleo. No puede haber desarrollo porque éste depende, en buena medida, del trabajo suficiente y bueno y de que el Estado produzca los bienes públicos indispensables para la vida de cualquier sociedad. Un Estado pobre no puede superar la pobreza de su gente. Sólo reproducirla.
de La Jornada: Política https://ift.tt/2tUqcF8
No hay comentarios:
Publicar un comentario