Entre 2020 y hasta julio de 2021, instituciones de salud y gobiernos de los estados destinaron más de 113 millones de pesos a la compra de Ivermectina para el tratamiento de Covid-19. Además de que la Secretaría de Salud (Ssa) no recomienda el uso del fármaco, las adquisiciones revelan disparidades en los precios. Destaca el caso de Baja California, que pagó 10 veces más por cada pieza en comparación con el Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS), de acuerdo con un análisis del Instituto Farmacéutico (Inefam).
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