“Es algo maravilloso poder andar libremente en un país sin temor a nada”, relató Éric, originario de Honduras quien, por motivos de seguridad, tuvo que dejar “su lugar”. Hoy, además de trabajar como conductor en la empresa Uber, ayuda a otros que, como él, necesitaron ayuda para integrarse y adaptarse en un país que les dio refugio.
de La Jornada: Política https://ift.tt/2twzJhL
No hay comentarios:
Publicar un comentario