jueves, 2 de mayo de 2019

Julio Hernández López: Astillero

Primer primero de mayo de la llamada Cuarta Transformación. Aparición triunfal del líder proletario de temporada, Napoleón Gómez Urrutia, al frente de su creación sindicalista de corte internacional. Aún oficialmente no aceptada, casi en condición de tolerada, Elba Esther Gordillo mostró poder de convocatoria gastronómica mediante una sesión con miles de profesores. Receptor de abiertas mentadas de madre de parte de un segmento del respetable público obrero, el dirigente cetemista Carlos Aceves del Olmo amenazó con pararse de su silla de ruedas para partirle la cara a quien de entre la multitud pudiera corresponder. Los viejos y los nuevos jinetes del sindicalismo se exhibieron en jaripeo distinto, sentados a comer con el Presidente de la República de los nuevos estilos, los nuevos aires y las nuevas tablas de la legalidad laboral, recién entregadas a Palacio Nacional por los comisionados legislativos que en el mismo día de descanso obligatorio recibieron fotografiadas felicitaciones personales del máximo jefe 4T que así agradeció los buenos servicios de sus operadores camarales, Mario Delgado y Ricardo Monreal, pastores subrogados de San Lázaro y el Senado, respectivamente.

de La Jornada: Política http://bit.ly/2IWaPlw

No hay comentarios:

Publicar un comentario