El confinamiento a causa del Covid-19 llevó a Rubí Huertas a un severo cuadro de depresión. No concebía la vida ni la interacción social a través de una pantalla. La crisis fue tan grave que consideró quitarse la vida. “Pensé: si el futuro va a ser éste, es un asco. No quiero vivir así. Y concluí que lo mejor sería terminar”.
de La Jornada: Política https://ift.tt/3jIswV0
No hay comentarios:
Publicar un comentario