Para los gobiernos de Estados Unidos e Inglaterra, Venezuela no es un país soberano, sino un cofre lleno de lingotes de oro, del que es necesario apoderarse por el bien de la humanidad, utilizando para ello todas las posibles herramientas que tengan a la mano. Ante las visibles dificultades, con las que ahora se enfrenta el distinguido presidente estadunidense, considerado como el mejor mandatario que ha tenido ese país, de acuerdo con las acertadas declaraciones del propio señor Trump, se hace necesario por ahora, que sea el jefe del gobierno británico quien tome el mando de las operaciones que puedan ser necesarias para hacerse del tesoro. Para ello, ese gobierno ha dado su primer paso: Desconocer al gobierno de Nicolás Maduro y afirmar en nombre del imperio británico, que el gobierno legítimo de ese país es un señor de apellido Guaidó, electo democráticamente (aunque bien a bien, aún no se sabe por quiénes).
de La Jornada: Política https://ift.tt/2ZC9UN5
No hay comentarios:
Publicar un comentario