No viene a cuento hablar de la salvaje corrupción que hemos vivido en este principio de milenio, porque en eso andan quienes saben y pueden hacer algo al respecto. Simplemente dedico estas líneas a terminar mi reflexión sobre la debacle ocasionada por Vicente Fox y Felipe Calderón, de quienes he hablado en mis dos entregas anteriores, llevada casi hasta las últimas consecuencias por el gobierno “priísta” de Enrique Peña Nieto.
de La Jornada: Política https://ift.tt/3gkHZZ4
No hay comentarios:
Publicar un comentario