Muchos de los rasgos del año venidero pueden, desde ahora, escudriñarse con visión provisional. Serán tiempos de elecciones y presiones financieras adicionales derivadas de limitantes impuestas por la pandemia. Lo electoral, en especial, no será motivo de este artículo. Muchos analistas ya lo hacen y continuarán en esa batalla con marcado y ladeado ahínco. Concentraré este trabajo en algunas de las líneas definitorias adicionales que tienen que ver con las urgencias programáticas y financieras. Estas urgencias cercarán al gobierno federal y sus propósitos de introducir niveladores en el reparto equitativo de los bienes y servicios colectivos. Es decir, qué tantas acciones prácticas, además de las ya instaladas, se podrán añadir al curso de 2021 en lo tocante a la justicia social prometida.
de La Jornada: Política https://ift.tt/3gcO3SA
No hay comentarios:
Publicar un comentario