El papa Francisco aceptó este martes la renuncia del obispo de Ciudad Victoria, Tamaulipas, Antonio González Sánchez, quien el 15 de febrero pasado afirmó durante una misa que usar cubrebocas y tener miedo al coronavirus significaba “no confiar en Dios”. En un comunicado, la Conferencia del Episcopado Mexicano dio a conocer lo anterior, que también se publicó en L’Osservatore Romano. La diócesis había difundido una carta en la que indica: “Se ha confirmado con exámenes médicos un incipiente Alzheimer que le dificulta seguir sirviendo pastoralmente como él quisiera”.
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